Estamos todos dispuestos, para luego de 8 años, volver a juntarnos en este fiesta juvenil que convocará a 400 personas. Los esperamos en Viña del Mar, entre el 26 y 30 de diciembre.
Faltan cinco días para el anhelado Segundo Encuentro Provincial de Jóvenes de la Congregación de los Sagrados Corazones Provincia Chile-Argentina. El objetivo consiste en reunir a las diversas obras SSCC, para renovar el sentimiento de pertenencia, bajo el lema “Desde la raíz renovamos la vida”.
Adrián Neira, coordinador provincial de la Pastoral Juvenil, nos expresa que “las obras de los chiquillos son muy distintas unas de otras, por lo que, durante el encuentro, debemos trabajar para poder integrarlas de forma paulatina y constante”. Además, Adrián asegura que la pandemia y el paso de los años impidieron la realización de este encuentro
Las delegaciones que participan vienen desde distintos puntos del país y representan a las parroquias a cargo de la congregación, sus cuatro colegios, centros pastorales juveniles (CPJ), comunidades de vida (COMVI) y dos representantes de Merlo, Argentina.
La jornada contará con la presencia de 400 jóvenes, quienes participarán en una serie de actividades, en que el trabajo de cada día tendrá un eje temático central, pero siempre basándose en una labor en comunidad. “Todas aquellas personas que se inscribieron al encuentro provincial pertenecen a alguna de las pastorales juveniles de los Sagrados Corazones y estarán acompañadas de asesores que guiarán el camino de sus obras, para que puedan reconocer la diversidad de estas y generar un ejercicio de integración y dependencia hacia la congregación” señaló Adrián Neira.
Asimismo, los 12 asesores de Concepción tienen una tarea especial, ya que aportan una comunidad de vida distinta a la de otras delegaciones al mantener con vida y alegría a la única COMVI de la provincia, que integra a universitarios, por lo que su perspectiva en la guía de las obras de los jóvenes le dará un toque especial a este encuentro provincial.
Confiamos que este esperado encuentro pueda ser semilla y renovación en muchos jóvenes que conforman nuestra congregación, para que puedan encontrar una identidad propia a través de sus obras y para poder compartir, profundizar y establecerse en la experiencia de fe y riqueza de la vida en comunidad.
¿Qué debe llevar y no llevar los jóvenes?
